"España destaca entre las naciones prósperas con menor brecha salarial, según la OIT"
La crisis inflacionaria que afectó a la gran mayoría de los países del mundo en 2022 y 2023 comenzó a superarse de manera generalizada el año pasado. Una clara evidencia de esto es que, tras ese periodo de aumento sostenido de los precios que llevó a que el crecimiento de los salarios reales alcanzara valores negativos, los salarios medios nominales a nivel global volvieron a experimentar un crecimiento que superó la inflación, generando incrementos en el poder adquisitivo en la mayoría de las naciones. Específicamente, las remuneraciones medias reales (descontando la inflación) crecieron en promedio en el mundo un 2.7%, siendo este el mayor aumento en 15 años. Sin considerar el impacto de China, cuyo rápido crecimiento distorsiona la cifra global, el avance de los salarios reales a nivel mundial fue del 2,3% en 2024.
Así lo indica la novena edición del Informe Mundial sobre Salarios 2024-2025 elaborado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), cuyas conclusiones por regiones se conocieron a finales de noviembre pasado y este miércoles se han conocido los detalles por países. El documento analiza también el estado de la equidad salarial en el mundo y es en este punto donde España sale mejor parada, ya que este organismo la sitúa entre los países con rentas altas que menos desigualdad salarial tiene. El 10% de los trabajadores españoles mejor pagados acumulan el 23% de la masa salarial, frente al 10% que menos cobra, que ingresan solo el 0,5%. Esta brecha es 15 puntos superior en el promedio mundial, ya que el 10% de los ocupados que más cobran acumulan el 38% de la masa salarial de todo el mundo.
En el caso de España, los salarios reales disminuyeron un 3.5% en 2022, para recuperarse en el 2023, creciendo un 1,4% y 0,6% en 2024 (según la proyección que hace la organización para todo el año pasado. No obstante, la recuperación de los salarios españoles fue tres décimas inferior al promedio de las economías avanzadas del G20, según destaca la OIT. De hecho, el crecimiento acumulado en 2022 y 2023 no compensa el poder de compra perdido en 2022, quedándose un punto y medio por debajo.